La inmersión en La Catedral (Puerto de la Cruz, Tenerife) es un espectáculo submarino que evoca la arquitectura gótica: una cúpula y arcos naturales de roca volcánica que alcanzan unos 20 m de altura y se extienden entre los –6 m y –40 m de profundidad . El acceso se realiza en barco, con un descenso inicial a –20 m, seguido de un recorrido por bóvedas, pasillos y cuevas de gran belleza.
El entorno alberga una rica biodiversidad: morenas, langostas, cangrejos, nudibranquios, pejeverdes, viejas y jureles; fuera, en la pared exterior, es posible avistar medregales, bicudas y otros pelágicos. Con corrientes moderadas y una dificultad clasificada como media, se recomienda para buceadores con certificación Advanced o equivalente.
El juego de luces y sombras en su interior crea un escenario mágico, ideal para fotografía submarina, especialmente con haces de luz que atraviesan tragaluces naturales. En resumen, La Catedral ofrece una inmersión impresionante tanto a nivel visual como por su valor biológico y geológico.